1.- Hacer un hoyo de 1m por 1m y de 30 a 50cm de profundidad (en la tierra), también puedes utilizar un contenedor de madera.
2.- Coloca en el fondo una capa de aserrín para evitar malos olores y conservar la humedad.
3.- Coloca productos orgánicos como pedazos de fruta, verduras, cáscaras de huevo, frijoles, arroz, etc. (si tu familia deja algo a la hora de la comida que ya no se vaya a comer eso te puede servir para tu composta). Si está muy seca agrega un poco de agua para conservar la humedad.
3.- Cubre los desperdicios con una capa de aserrín.
4.- Cubre el hoyo con una capa de tierra.
¡DATO INTERESANTE!: La materia orgánica, cuando se está descomponiendo, genera un calor de aproximadamente 70° C, esto sirve para matar los huevecillos de insectos y la mayoría de los microorganismos que causan enfermedades.
5.- Cada 8 o 10 días debes remover la composta con una varilla para oxigenarla.
Si al remover tu composta ves que hay hormigas NO LAS MATES ya que ellas ayudan al proceso de descomposición.